Pensamientos cotidianos, para nada científicos , que no cambian realidades…Aun así necesarios en ese momento preciso dónde surgen, para hacer pensar eso que antes no nos cuestionábamos, o para mantenerse en pausa, hasta que necesitemos valernos de ellos para algo nuevo que nos surge, una herramienta más , un truco más, serán las palabras que justo se ordenan de esa forma, tal vez salgan del encuentro con otra realidad, que rico resulta el intercambio, el hablar con alguien que se movió una pulgada lejos y vio las cosas de otra manera.
Y cuando la respuesta estuvo ahí hace rato, sólo nos queda esperar, o buscar y buscar la pregunta que nos ayude a armar el puzzle…
Entre tanta autocrítica , inconformismo y revolución interna…nos quedamos viendo en tercera persona a nuestro yo… La vida nos vive entre cuestionamientos, sigue su curso en un costado…somos testigos y nunca protagonistas…
¿Será que nos quedamos pensando que habrá segunda oportunidad?
Rompiendo firmes cimientos que solo bloquean el paso ,no es hacia adelante adonde vamos, es hacia todas partes…el sentir nos abruma, el ir siendo nos atraviesa…nos vive.
En este mar de fueguitos hay quienes se queman solo de pensar en vivir, se marean con tanta chispa y se quedan solo a atestiguar, a criticar el paso de los demás.
Tal vez es tiempo de dibujarse dentro del cuadro, y no solo viendo el paisaje.
Tal vez es tiempo de dejar de pensar que en cada cambio hay un final, el simple hecho de pensar que es más bien un nuevo comienzo, predispone al optimismo, se siente una nueva libertad, un nuevo camino…
Tal vez es tiempo de sacar de la hoja y del espiral de nuestra mente la idea de darle espacio a que el azar pase, no más “tal vez” , en ese experimento puede que hasta podamos engañar a la vida…y distraerla de su curso, para estar nosotros a cargo…
